Dos hermanitos de 9 y 10 años que viven en barrio El Espinillo, un asentamiento humilde ubicado en el límite entre Capitán Bermúdez y Granadero Baigorria, fueron rescatados en medio del temporal del miércoles pasado después de que un árbol aplastara su casa. Los héroes de la historia fueron los vecinos que, pese a que la tormenta también destruyó sus casillas, dejaron todo de lado para salvarles la vida.

“Estábamos durmiendo y de la nada sentimos un ruido y quedamos atrapados. En la desesperación mi pareja logró salir y vio que estaba todo encima de los chicos. Gritábamos por ayuda y estábamos en la misma porque los vecinos nos pedían auxilio a nosotros. Era desesperante”, recordó en Telenoche Rosario (El Tres) Yoana, la mamá.

El árbol que colapsó sobre la vivienda precaria era un eucalipto de gran porte. Afortunadamente, en ese momento ambos hermanitos estaban acostados en la parte baja de una cucheta que les amortiguó el impacto, pero quedaron atrapados dentro de la misma y con severas dificultades para respirar.

“Cuando pude salir, veo a los chicos y uno tenía la mitad del cuerpo atrapado en la cucheta y el otro estaba al lado acostado con la cucheta arriba. Por suerte vinieron todos los vecinos corriendo y empezaron a ayudar”, contó Gonzalo, padre de los chicos.

Después de una hora y media de trabajo en medio del temporal, entre todos lograron sacar parte del tronco que estaba presionando sobre la cucheta y liberar a los chicos. “Lo único que queríamos era sacar a las criaturas. Escuchábamos los gritos de desesperación”, relató Fabián, uno de los vecinos que rápidamente acudió al rescate.

Según recordó, casi en simultáneo con la caída del árbol sobre la casa donde estaban los nenes, el viento arrancó el techo de la suya y lo poco que tenían se empezó a perder. Pese a eso, una vez que aseguró que su pareja y los chicos estaban al resguardo, se puso a coordinar el operativo para rescatar a los hermanitos.

“Llegamos con otro vecino más, pedimos una motosierra para empezar a cortar. Gracias a dios trabajamos en equipo, fuimos cortando, sacamos y logramos rescatarlos. Pese a la desesperación pensábamos que estaban los chicos abajo y entonces fuimos apuntalando mientras cortamos para que se aplasten”, explicó el hombre.

Una vez liberados, su papá ayudó a sacarlos hasta el ingreso del barrio ya que la ambulancia no podía ingresar por el barrial y los trasladaron al hospital Eva Perón de Baigorria. “Yo estaba asustada porque uno de los dos estaba muy morado, pero en el hospital los revisaron y no tenían ni un hueso roto. Quedaron en observación por cualquier cosa y al día siguiente le dieron el alta”, detalló Yoana.

“Los médicos no lo podían creer, decían que era un milagro porque era mucho el peso que tuvieron encima. Cuando les preguntamos a ellos, nos dijeron que los dos juntitos se daban fuerzas. Contaban hasta tres y empujaban para arriba para que el árbol no los aplaste”, agregó la mujer.

Después del heroico rescate las familias afectadas empezaron al limpieza del lugar y la reconstrucción de sus casas. Quienes puedan aportar ropa de niños, principalmente calzado, también para adultos y materiales para rearmar las estructuras, pueden escribir al 3416085475 / 3412111049.