Según un nuevo estudio, las personas embarazadas con esclerosis múltiple (EM) cuentan con una mayor posibilidad de padecer enfermedades mentales durante el embarazo o en los primeros años tras el parto, a diferencia de quienes no sufren de esta patología. La investigación, a cargo de miembros de la Academia Estadounidense de Neurología, fue publicada en Neurology.

"Estudios anteriores han demostrado que las mujeres con EM tienen más posibilidades de sufrir depresión, trastornos de ansiedad y trastorno bipolar, en comparación con mujeres sin EM", afirmó la autora del estudio, la Dra. Ruth Ann Marrie, miembro de la Academia Estadounidense de Neurología.

Y añadió: "Los problemas de salud mental pueden afectar tanto a padres como a hijos, por lo que es importante comprender cómo los problemas de salud mental vinculados al embarazo afectan a las personas con EM".

El estudio

Con una muestra compuesta por 894.852 embarazadas de las cuales 1.745 padecían EM, 5.954 epilepsia, 4.924 síndrome del intestino irritable y 13.002 diabetes; se compararon resultados con las 869.227 embarazadas que no padecían ninguna de las afecciones enunciadas.

Los investigadores analizaron los registros médicos de quienes dieron a luz durante un lapso de 15 años, desde dos años antes de la concepción hasta tres años tras los partos. Es así que se detalló cuántas participantes habían sido recientemente diagnosticadas o padecían una enfermedad mental durante el embarazo, y en el primer, segundo y tercer año luego de parir. Entre las enfermedades mentales y síntomas patológicos se encontraron ansiedad, depresión, trastorno bipolar, psicosis, intentos de suicidio y abuso de sustancias.

De esta forma, se halló que las enfermedades mentales afectaban al 42% de las personas con EM durante el embarazo, aumentando un 50% en el primer año tras el parto en comparación con el 30% de personas sin EM. Un 8% de personas con EM tuvieron diagnósticos de enfermedades mentales durante el embarazo y 14% tuvo nuevos diagnósticos en el primer año tras el nacimiento, en comparación al 7% y 11% de personas sin EM.

Tras ajustar algunos factores como la edad al momento de la concepción e ingresos al área de residencia, se encontró que personas embarazadas con EM padecían un riesgo 26% mayor de enfermedad mental durante el embarazo y 33% mayor tras el parto en comparación con personas sin EM.

También se descubrió que el riesgo fue en torno a todas las enfermedades mentales y conductas patológicas exceptuando intentos de suicidio. Respecto del consumo de sustancias, personas con EM tenían un riesgo 0,54% mayor de padecerlo durante el embarazo y 6% tras el parto.

"Estos hallazgos enfatizan la necesidad de un tratamiento preventivo y temprano de enfermedades mentales", expuso la autora. Y sentenció: "Los estudios futuros deberían analizar cómo afecta la EM a la salud mental de las madres durante y tras el embarazo y, si es peor en las diferentes etapas de la EM. Los médicos deberían conocer estos riesgos, asegurarse de controlar la salud mental y, de esa forma, proporcionar tratamiento en caso de necesitarlo".

Fuente: Europa Press.