La endometriosis afecta a 190 millones de mujeres en edad reproductiva a nivel mundial. Se trata de una patología en la que el endometrio (tejido que se forma cada mes dentro del útero y que, de no haber fecundación, se elimina con el sangrado menstrual) crece fuera de su lugar habitual, que es el interior del útero.
A partir de un nuevo estudio, se vincula la endometriosis con las experiencias traumáticas vivenciadas por las mujeres, independientemente de la predisposición genética que se tenga a padecer esta enfermedad. El equipo conformado por expertos internacionales, publicó sus hallazgos en JAMA Psychiatry.
Nuevos hallazgos sobre los tipos de eventos traumáticos
Si bien ya hay estudios que vinculaban traumas psicológicos con la endometriosis, había poca información sobre el papel del tipo de trauma y la predisposición genética. Este nuevo estudio descubre los mecanismos genéticos compartidos que asocian la endometriosis con el trastorno de estrés postraumático y otros tipos de experiencias traumáticas, además de proporcionar nuevos conocimientos sobre cómo los diferentes tipos de eventos traumáticos se asocian con la enfermedad.
Más probabilidades
La investigación se basó en análisis observacionales y genéticos de 8.276 mujeres con endometriosis y 240.117 pacientes de control, inscritas en el UK Biobank, una base de datos biológicos del Reino Unido. Allí se vio cómo las mujeres con endometriosis tenían más posibilidad de contar con determinadas experiencias traumáticas en comparación con mujeres sanas.
Por ejemplo, tenían una probabilidad un 17% mayor de haber presenciado una muerte súbita, un 16% más de haber sufrido una agresión sexual en la edad adulta, y de un 36% más de haber recibido un diagnóstico que amenazara su vida.
Se realizó un estudio de asociación del genoma completo (GWAS) de la endometriosis y de la interacción entre los eventos traumáticos y el riesgo poligénico de la enfermedad. Se trata de un enfoque que evalúa el impacto combinado de múltiples variantes genéticas en el desarrollo de una enfermedad, en lugar de centrarse en un solo gen.
La importancia de evaluar la salud física y mental
Los resultados de estos análisis han revelado que la enfermedad se correlaciona genéticamente con varias situaciones asociadas al trauma, siendo la evidencia más sólida la vinculada con el trastorno de estrés postraumático y el maltrato infantil.
Los vínculos identificados entre la endometriosis y los eventos traumáticos coinciden con un estudio anterior del mismo equipo de investigación que relacionaba la enfermedad con la depresión, la ansiedad y los trastornos alimentarios. Por todo ello, los hallazgos ponen de relieve la importancia de evaluar la salud física y mental de las pacientes con endometriosis.
Si bien es necesario confirmar los resultados en otras cohortes, desde el estudio sugieren que se pueden diseñar programas de detección temprana teniendo en cuenta no solo factores genéticos, también antecedentes de traumas físicos u otros factores de riesgo.
Fuente: EFE.