El famoso "Último Primer Día" (UPD), es una tradición que se instaló entre los estudiantes que comienzan el último año de secundaria y que, por consecuencia, atravesarán el último primer día de clases en su institución educativa. En pos de celebrar, muchos estudiantes suelen reunirse la noche anterior, consumir excesivamente alcohol y luego asistir a ese famoso primer día de clases en condiciones preocupantes para familias y cuerpo docente.

Para abordar este fenómeno, desde la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina (SEDRONAR) publicaron una serie de recomendaciones en argentina.gob.ar con la finalidad de que escuelas y familias puedan prevenir riesgos y acompañar a los jóvenes en forma responsable.

"El desafío para los adultos es encontrar un equilibrio entre el festejo y el cuidado, promoviendo alternativas saludables que permitan a los jóvenes disfrutar sin exponerse a riesgos innecesarios", explicaron.

Acompañar a los jóvenes en el Último Primer Día

A raíz de un trabajo en conjunto entre escuelas, familias y autoridades, algunas de las estrategias propuestas son:

-Articular acciones con las familias para reforzar el acompañamiento.

-Incluir a los Centros de Estudiantes en la planificación del evento.

-Evitar medidas exclusivamente punitivas y promover la reflexión.

-Contar con presencia de personal de seguridad y salud en puntos estratégicos.

-Generar espacios de diálogo con los estudiantes para hablar sobre los riesgos del consumo de alcohol.

-Planificar actividades alternativas dentro de la escuela que permitan celebrar de manera segura.

-Involucrar a las familias y la comunidad educativa en la organización del evento.

-Brindar información clara y científica sobre el impacto del alcohol en la salud.

-Fomentar el cuidado entre pares para evitar situaciones de vulnerabilidad.

El alcohol y su impacto en la salud de los adolescentes

Ya es un lema conocido que el consumo de alcohol está prohibido en menores de 18 años, a raíz de considerarse un riesgo. Entre sus principales efectos, el alcohol:

-Afecta el rendimiento escolar al alterar la atención y la concentración.

-Reduce la capacidad física y aumenta el riesgo de lesiones en actividades deportivas.

-Aumenta el riesgo de dependencia en la adultez.

-Puede generar conductas de riesgo, como accidentes o situaciones de violencia.

Además, es importante derribar mitos sobre el alcohol, como la falsa creencia de que "tomar café o darse un baño ayuda a eliminar sus efectos". De hecho, el 90% del alcohol ingerido es procesado por el hígado, por lo que su eliminación no puede acelerarse.

En caso de detectar a un joven con signos de intoxicación, es fundamental:

-No dejarlo solo y colocarlo de costado para evitar complicaciones.

-Brindarle agua y abrigo mientras llega la asistencia médica.

-Llamar al número de emergencias si presenta síntomas graves.

-Contactar a un adulto responsable para su resguardo.

Conclusión

El Último Primer Día es un evento importante en la vida de los jóvenes, pero debe celebrarse con responsabilidad y cuidado. La clave está en promover un festejo seguro, donde la comunidad educativa y las familias trabajen juntas para garantizar el bienestar de los estudiantes. Los consejos del SEDRONAR, disponibles en Argentina.gob.ar, ofrecen herramientas para prevenir situaciones de riesgo y fomentar hábitos de cuidado.

Fuente: NA.