Después de las declaraciones del vocero Manuel Adorni sobre que la Argentina iba a iniciar el proceso para retirarse de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el presidente Javier Milei reveló que también evalúan la posibilidad de que el país también deje de formar parte del Acuerdo de París.

“El calentamiento global no tiene nada que ver con la presencia humana. Es un problema relacionado con los ciclos de temperatura del planeta. Actualmente, estamos viviendo el quinto ciclo de temperaturas elevadas, y en los cuatro ciclos anteriores el ser humano no existía”, justificó el mandatario en declaraciones al diario francés Le Point.

El Acuerdo de París es un tratado internacional sobre el cambio climático jurídicamente vinculante para los países que lo firmaron. Surgió en diciembre del 2015 durante la 21ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se celebró en París y entró en vigencia en noviembre del 2016.

En total son 196 los países que adhirieron al acuerdo. La Argentina ratificó su adhesión al mismo en 2016 bajo la gestión de Mauricio Macri. 

Su objetivo es limitar el calentamiento mundial a muy por debajo de 2, preferiblemente a 1,5 grados centígrados, en comparación con los niveles preindustriales. Para alcanzar este objetivo de temperatura a largo plazo, los países se proponen limitar las emisiones de gases de efecto invernadero lo antes posible para lograr un planeta con clima neutro para mediados de siglo.

Según está publicado en su sitio oficial: “La aplicación del acuerdo requiere una transformación económica y social, basada en la mejor ciencia disponible. El Acuerdo de París funciona en un ciclo de cinco años de medidas climáticas cada vez más ambiciosas llevadas a cabo por los países”.

En 2020, los países ya presentaron sus planes de acción climática y ahora en 2025 es el turno de rever esas políticas y analizar cómo se vienen aplicando.

¿Qué implicaría la salida de la Argentina del acuerdo?

Las declaraciones de Milei van en sintonía con lo anunciado también por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre que ese país también saldrá del acuerdo. Actualmente solo hay tres Estados, que forman parte de Naciones Unidas, que no adhirieron al Acuerdo de París: Irán, Libia y Yemen.

Actualmente el consenso climático proporciona un marco para el apoyo financiero, técnico y de creación de capacidad a los países que lo necesitan. Los fondos surgen de los países desarrollados que se comprometieron a entregar asistencia financiera a los países menos dotados y más vulnerables, al tiempo que se alienta por primera vez a las demás partes a aportar contribuciones voluntarias. 

“La financiación del clima es necesaria para la mitigación, ya que se requieren inversiones a gran escala para reducir significativamente las emisiones. La financiación de la lucha contra el cambio climático es igualmente importante para la adaptación, ya que se necesitan importantes recursos financieros para adaptarse a los efectos adversos y reducir los efectos de un clima cambiante”, sostiene.