Se va el Peque. Diego Schwartzman decidió colgar la raqueta tras 14 años de una prolífica carrera que lo llevó a ser número 8 del mundo a fines de 2020. El Lawn Tennis Club de Buenos Aires –donde supo consagrarse allá por 2021– es el escenario elegido. Puede ser en el debut ante el duro chileno Nicolás Jarry, este martes a la noche, o en cualquiera de las siguientes fases si logra ganar algunos partidos.
A lo largo de su trayectoria como profesional, el nacido en Capital Federal hace 32 años fue siempre uno de los grandes protagonistas del circuito. Basta este dato para demostrarlo: desde el US Open 2014 hasta el mismo torneo 2023 participó en 36 Grand Slams de forma consecutiva.
En tiempos en que Juan Martín Del Potro era el tenista número uno del país y se destacaba muy por encima del resto, el Peque encabezaba la otra parte de la delegación nacional que lucía en el circuito. De hecho, tras las lesiones del tandilense Schwartzman fue el mejor jugador criollo durante un par de años.
Con su "escaso" 1.70 metro de altura (el promedio de los mejores tenistas del ranking es 1.85), Peque se las ingenió para pelearles de igual a igual a los grandes. Por caso, en su carrera se anotó triunfos ante Rafa Nadal, Alex Zverev, Casper Ruud, Dominic Thiem y Marin Cilic, entre otros. Incluso en 2017 se convirtió en el primer cuartofinalista de Grand Slam (US Open en este caso) más bajo tras Jaime Yzaga en 1994.
En su carrera jugó 475 partidos en los que cosechó 250 triunfos y 225 traspiés. Ganó 4 torneos (Estambul 2016, Río de Janeiro 2018, Los Cabos 2019, único en cancha rápida, y Buenos Aires 2021), fue finalista en otros 10 certámenes (incluyendo el Máster 1000 de Roma en 2020 donde cayó con Djokovic) y llegó a la semifinal de Roland Garros en 2020. Además, representó a Argentina tanto en Copa Davis como en Juegos Olímpicos.
Su amigo de Hollywood
Schwartzman forjó una relación con la mega estrella del cine Ben Stiller (actor de Loco por Mary, Mi novia Polly, Una noche en el museo y Los Fockers, entre otros éxitos). Se conocieron en el US Open en 2019 (Stiller es fanático del tenis y suele ir a ver los grandes torneos) donde compartieron una larga charla y quedaron en contacto. Volvieron a verse en otras ocasiones e intercambiaron mensajes a través de las redes sociales. Peque dijo al respecto: "No llega a ser mi amigo pero tenemos una gran relación"
El esfuerzo de su familia
En sus inicios como tenista, la familia de Peque no pasaba un buen momento económico y debió tomar medidas drásticas para "bancar" la carrera del pibe. Una de ellas fue vender el auto que tenían para que Diego pueda realizar una gira por el interior del país para competir. "Mi viejo vendió el Taunus que teníamos por $1.200 de aquel momento. Por suerte terminó saliendo bien" explicó el tenista.
Ahora llegó la hora del adiós. Su nivel fue cayendo en los últimos años hasta que en 2024 tomó la decisión de colgar la raqueta, algo que hará efectivo tras su participación en el ATP de Buenos Aires. Sin dudas, se lo va a extrañar.