El Gobierno nacional decidió clausurar por completo la intermediación que hacían algunas obras sociales entre los aportes de trabajadores y empresas con las firmas de medicina prepaga. De acuerdo a la resolución de la Superintendencia de Servicios de Salud publicada este viernes en el Boletín Oficial, la posibilidad de que un trabajador derive parte de sus aportes a una obra social para que esa entidad traspase luego el dinero a una empresa que brinda el servicio de salud queda completamente eliminada. Es decir, el aporte debe ir directo a la prepaga.

De acuerdo a los cálculos del Gobierno la medida abarca a cerca de 1.380.000 trabajadores y sus familias. La expectativa oficial es que el fin de la intermediación permita abaratar el costo de las cuotas.

En concreto, la resolución cambia la situación de los trabajadores del sector privado que en lugar de derivar sus aportes a una obra social sindical optan por una prepaga.

Ya el decreto 70/2023 había eliminado la obligación de pasar por una obra social para poder derivar aportes a una empresa de medicina prepaga.

Hasta ese momento, si el empleado quería recibir las prestaciones de una empresa de medicina prepaga, debía derivar una parte de sus aportes a una obra social que actuaba como intermediario y el resto de sus aportes a un prestador privado. Por esa intermediación, las obra sociales se quedaban con un 2% del aporte total.

La resolución deja una ventana abierta durante sesenta días para que la persona que quiera revertir ese traspaso de todos sus aportes a una prepaga pueda dar marcha atrás con el cambio y optar por una obra social, que deberá hacerse cargo de toda la cobertura de salud.