El Ejército de Israel anunció que Hamas entregó este jueves los ataúdes de cuatro rehenes, entre los que se encontraban la argentina Shiri Bibas y sus hijos Ariel y Kfir. Los cuerpos cruzaron el territorio de ese país en la mañana argentina, indicó la fuerza. Se trata del primer intercambio de este tipo desde el acuerdo de alto el fuego.

“Hace poco, las fuerzas de las FDI y de la ISA (Agencia de Seguridad de Israel, también conocida como Shin Bet) trasladaron los ataúdes de los cuatro rehenes fallecidos a través de la frontera con Israel, y los están trasladando al Instituto Nacional de Medicina Forense para que sean sometidos a un procedimiento de identificación. Representantes de las FDI están acompañando a sus familias en este momento difícil”, anunció el Ejército israelí en X.

Shiri Bibas y sus dos hijos, Ariel y Kfir, quienes hoy tendrían cinco y dos años, respectivamente, fueron secuestrados en el marco del ataque de Hamas el 7 de octubre de 2023.

El grupo islamista había asegurado en noviembre de ese año, poco después de la primera tregua de la guerra, que tanto la madre, como los dos menores, habían muerto n un ataque israelí contra Gaza. Kfir era el rehén más joven secuestrado, cuando tenía tan solo 9 meses, del kibutz Nir Oz, a tan solo 1,5 kilómetros de la divisoria con Gaza.

El padre de los niños y pareja de Shiri, es Yarden Bibas, liberado el último 1º de febrero.

Representantes de las fuerzas armadas acompañaban a los familiares de los fallecidos, anunció el Ejército israelí. La Policía transmitía en vivo a través de internet el tránsito de la comitiva por las carreteras israelíes rumbo a Tel Aviv, donde los fallecidos pasarán un proceso de identificación que puede durar desde horas hasta dos días, según han explicado fuentes militares.

Antes de salir de Gaza, el Ejército celebró una ceremonia dentro del enclave cuando recibió los cuerpos de manos de la Cruz Roja junto a miembros de la familia, informó EFE. Según el diario israelí Haaretz, cuando las fuerzas armadas recibieron los ataúdes los escanearon para comprobar que las cerraduras podrían abrirse adecuadamente en el centro forense.