A los 76 años y con graves problemas de salud, Ozzy Osbourne se niega a tirar la toalla. El mítico cantante anunció días atrás la última reunión de los legendarios Black Sabbath, con la formación original, en un concierto programado para julio en el estadio del Aston Villa, en Birmingham, Inglaterra, la ciudad donde la banda pionera del heavy metal surgió en 1968. Mientras tanto, con 55 años de carrera y excesos a cuestas, el músico intenta hacer las paces con una dura realidad: el avance del Parkinson.

La enfermedad de Osbourne ha progresado hasta el punto en que ya no puede caminar. En su programa Ozzy’s Boneyard, de la radio SiriusXM, el músico habló esta semana sobre lo que los fans pueden esperar de su última actuación en vivo, que incluirá una reunión con Black Sabbath.

“He llegado a 2025”, dijo Osbourne. “No puedo caminar, pero ¿sabés en qué estaba pensando durante las vacaciones? A pesar de todas mis quejas, todavía estoy vivo. Puede que me lamente por no poder caminar, pero miro hacia el futuro y hay gente que no hizo ni la mitad de lo que yo hice y no lo logró”.

Black Sabbath volverá a tocar en vivo por primera vez desde 2005 en un concierto benéfico titulado Back to the Beginning (“Vuelta al principio”), una presentación única que se llevará a cabo el 5 de julio en Birmingham. En la grilla figuran supergrupos de la música pesada como Metallica, Slayer, Pantera, Gojira y Alice in Chains, entre otros, con Tom Morello (Rage Against The Machine, Audioslave) como director musical.

Otros tiempos. Sabbath vuelve a los escenarios con su formación original (Facebook oficial).

Sharon Osbourne, esposa del cantante, confirmó la noticia sobre su estado de salud en una entrevista con The Sun tras el anuncio del concierto. "Está muy feliz de volver y muy emocionado por esto", dijo. "El Parkinson es una enfermedad progresiva, no es algo que se pueda estabilizar. Afecta diferentes partes del cuerpo y ha comprometido sus piernas. Pero su voz está tan bien como siempre".

En declaraciones a la BBC, Sharon también confirmó que esta será su última actuación. “Está muy emocionado por esto, por estar nuevamente con los chicos y todos sus amigos”, comentó. “Es emocionante para todos. Ozzy no tuvo la oportunidad de despedirse de sus fans y siente que no ha habido un punto final. Este es su punto final”.

En los últimos años, mientras Osbourne luchaba contra el Parkinson y se sometía a varias cirugías de columna, el cantante se mantuvo optimista con la idea de brindarles a los fanáticos una última actuación. En 2023, tenía previsto regresar al escenario en el festival Power Trip, pero esa aparición fue cancelada debido a problemas médicos.

Ozzy en 2012, durante la grabación de "13", la última placa de Black Sabbath.

“Lo estoy tomando un día a la vez, y si puedo actuar de nuevo, lo haré”, dijo Osbourne a Rolling Stone UK en noviembre de 2023. “Pero fue como decir adiós a la mejor relación de mi vida. Al comienzo de mi enfermedad, cuando dejé de hacer giras, estaba realmente enojado conmigo mismo, con los médicos y con el mundo. Pero, a medida que ha pasado el tiempo, me he dado cuenta de que tal vez deba aceptar ese hecho”.

Las ganancias de Back to the Beginning serán destinadas a la fundación Cure Parkinson’s, al Birmingham Children’s Hospital y al Acorns Children’s Hospice, con sede en Birmingham. El concierto se llevará a cabo en el estadio Villa Park, el hogar del equipo de fútbol favorito de Ozzy, el Aston Villa.