Un equipo de arqueólogos descubrió un conjunto de momias egipcias adornadas con lenguas y uñas de oro en una tumba de 2.000 años de antigüedad en la zona de Behnese, Egipto. El hallazgo es considerado uno de los más importantes en la región en años recientes.

Las momias, que datan de la era ptolemaica, fueron encontradas en una tumba colorida y ricamente decorada, rodeadas de amuletos antiguos y escenas rituales de deidades. Los expertos creen que estas lenguas ornamentadas estaban destinadas a permitir a los muertos hablar con el dios del inframundo, Osiris.

La excavación conjunta egipcio-española fue dirigida por arqueólogos de la Universidad de Barcelona y el Instituto del Próximo Oriente Antiguo. El equipo descubrió un total de 13 lenguas y uñas de oro, que se cree que fueron colocadas en la tumba para proteger a los muertos en su viaje al más allá.

El descubrimiento también incluyó escarabajos de los dioses Isis, Horus y Thoth, así como el símbolo de Djed, que se cree que representa la estabilidad y la eternidad. Las pinturas murales en la tumba muestran a los muertos y sus familiares presentando ofrendas a deidades como Anubis, Osiris y Ra.

El Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto describió el descubrimiento como "una importante adición a la historia de la zona" y destacó que "arroja luz sobre las prácticas religiosas prevalecientes en la era ptolemaica". El equipo de arqueólogos continúa excavando y estudiando la tumba para aprender más sobre la vida y la muerte en el antiguo Egipto.