Al término de una extensa audiencia desarrollada este miércoles en el Centro de Justicia Penal, la jueza penal Lorena Aronne resolvió dictar prisión preventiva por 90 días para la mujer sospechada de haber matado a su novio de un disparo el 25 de febrero en un departamento del centro de Rosario. La causa presenta puntos controvertidos, ya que la imputada y su defensa sostienen que se trató de un suicidio. En ese marco, anunciaron que apelarán la resolución de la magistrada.

Tomás Saravalli, de 39 años, fue hallado muerto sobre un sofá cama en el living de su departamento, ubicado en el sexto piso de un edificio de Alvear al 1500. Según el médico de Policía, presentaba un disparo en la región frontal. Personal de la Brigada Motorizada reportó que en su mano izquierda tenía una pistola calibre .40.

El fiscal Alejandro Ferlazzo estimó que el disparo fatal se produjo alrededor de las 5 de la madrugada. En el departamento también vivía la novia de Saravalli, Melisa P., de 44 años, quien esa noche durmió en la habitación tras haber mantenido una discusión con la víctima.

El martes por la mañana, Melisa P. declaró que se despertó a las 7.30 y encontró a su pareja desvanecida en la cama del living. Ante esta situación, llamó a una vecina que estudia medicina, quien comprobó que Saravalli no tenía signos vitales y dio aviso al 911. Según se informó, el llamado ingresó minutos después de las 8.30. Además, la imputada se comunicó con su padre, quien acudió al lugar.

Si bien en un primer momento se consideró la hipótesis de un suicidio, la intervención del Gabinete Criminalístico orientó la causa hacia un posible homicidio calificado.

Tras una primera actuación del fiscal de Homicidios Culposos Matías Edery, el caso pasó a manos de su colega Alejandro Ferlazzo, quien ordenó la detención de Melisa P.

En la audiencia, Ferlazzo sostuvo ante la jueza Aronne que la acusada "aprovechó el estado de indefensión de la víctima y efectuó el disparo utilizando un almohadón, que quedó sobre el rostro de Saravalli con un orificio de ingreso y egreso de proyectil". Además, señaló que el hombre era diestro, por lo que resulta inverosímil que haya sostenido el arma con la mano izquierda.

La abogada de la imputada, Malena Corvalán, defendió la inocencia de su clienta y solicitó su libertad, argumentando que no existen riesgos procesales, ya que la mujer estuvo a disposición de la Justicia desde el primer momento. Según la defensa, se trató de un suicidio. Durante la audiencia, Melisa P. brindó su versión de los hechos y respondió preguntas de la Fiscalía, según pudo saber Rosario3.

Por el momento, la defensa adelantó que apelará la prisión preventiva impuesta por la jueza Aronne, quien aceptó la calificación de la Fiscalía: homicidio calificado por el vínculo y por alevosía, agravado por el uso de arma de fuego, y tenencia ilegal de arma de fuego de guerra. Sin embargo, aún restan conocerse los resultados del dermotest y la extracción de datos del celular de la imputada.