Tras el ataque al colectivero este jueves por la tarde, en medio de la violenta seguidilla de crímenes a taxistas, el ministro de Seguridad santafesino, Pablo Cococcioni, dijo que su par nacional, Patricia Bullrich y el propio presidente Javier Milei, se pusieron a disposición y que esperan "definiciones" en el transcurso de la mañana. Aseguró que la Casa Gris “no retrocederá” en ninguna de las medidas que, se cree, desataron la ola de ataques en la calle y anticipó una nueva reorganización de la policía provincial.

"No vamos a sentarnos con la ranchada a negociar nada", afirmó Cococcioni este viernes en conferencia de prensa y anunció que habrá refuerzos federales, aunque no precisó cuántos. 

"Más allá del número nos interesa que se pueda coordinar un trabajo en conjunto, con intensidad y proactividad. Estamos en un estado de cosas ante el cual ninguna medida puede ser demasiado o extrema. Todo lo que se pueda hacer para recuperar el control de la calle hay que hacerlo y no hay que retroceder ninguna de las medidas", sostuvo. Y agregó: "Estoy arrepentido de todo lo que podríamos haber hecho mucho más severo".

Así, el ministro de Seguridad confirmó la política que lleva adelante el gobernador Maximiliano Pullaro, sobre todo en el Servicio Penitenciario y que algunos vinculan con el recrudecimiento de la violencia esta semana al difundirse las imágenes de presos "estilo Bukele". "La foto es lo de menos", sostuvo.

"El gobierno de Santa Fe y nacional va a hacer todo lo que hay que hacer para restablecer la paz social sin negociar con la mafia. Vamos a seguir con una política muy distinta y de mucha firmeza contra las organizaciones y vamos a demostrar que el Estado puede más", dijo.