Poco después de las 22 del lunes, un vecino vio un felino de gran tamaño en una zona muy transitada del centro de la localidad de Casilda, y dio aviso al municipio rápidamente antes que sembrara temor en los vecinos. Era un gato montés adulto y joven.
Veterinarios de esa municipalidad colocaron al felino una trampa para capturarlo de forma segura y sin lastimarlo, y notificaron luego a la Policía Ecológica, encargada de su traslado a su hábitat.
Según precisaron las autoridades a Casilda a Diario, “el animal no se mostraba para nada amigable. Parecía totalmente salvaje”, aunque no se lamentaron heridos.
Desde el municipio realizaban, tras la insólita aparición, un operativo especial para saber si existen más felinos de la misma camada en la zona.