Con el cambio de estación, tarde o temprano nos tendremos que enfrentar al cambio de armario. Y qué mejor idea que deshacerte de eso de la temporada pasada o de la que viene, que ya no vas a usar. Abandoná tu hábito de acumulador y recordá que menos es más.

La pregunta entonces es "¿qué vender?". Bueno, según el sitio trendencias, para empezar debemos hacer una lista que constará de tres partes: lo que nos vamos a quedar, lo que está demasiado viejo y pasado de moda, y lo que todavía tiene salida pero que nosotros ya no nos lo vamos a poner más. Este último grupo será el idóneo para venderlo y sacarnos un dinero extra a fin de mes.

Una imagen vale más que mil palabras, por eso es tan importante obtener una buena foto de la prenda o accesorio que queremos vender. Cuanto más atractiva, más rápida será la venta. El producto tiene que estar en sus mejores condiciones. Es importante que el futuro comprador se encuentre con un producto deseable. Si vas a vender zapatos, limpialos con una gamuza, para que estén impecables. Si vas a vender una prenda, podés lucirla pero procurá que no se vea tu rostro en la foto, para que el vendedor pueda imaginarse a sí mismo vistiendo esa unidad. Si vas a poner a la venta un collar o un par de lentes, es recomendable que elijas una superficie despejada y uniforme para colocar tus objetivos encima y lograr una imagen armoniosa. Tené en cuenta que la luz del ambiente tiene mucha importancia.