Con las herramientas que hoy disponemos podríamos controlar la hipertensión, en al menos el 80 al 90 % de los casos. Siempre hay casos de hipertensión resistentes. Su pregunta plantea la problemática del lado del paciente, aunque la misma tenga múltiples facetas. Una de las facetas es el paciente; otra es el propio médico; otra, los proveedores de la salud, es decir, los financiadores de la salud; ponerlas solos del lado del paciente es una simplificación.

Hace años hicimos una encuesta entre pacientes que habían recibido una angioplastia coronaria o cerebral, para saber si estaban recibiendo tratamiento adecuado y nos encontramos con que un magro 7% cumplía con los criterios del tratamiento adecuado.

Primero, los médicos tenemos que llevar a la práctica lo que el conocimiento científico nos está brindando. Ser conscientes que disponiendo de los tratamientos adecuados, sólo debemos ponerlo en acto. No siempre todos los médicos aplicamos todo aquello que disponemos: indicamos dosis insuficientes de medicamentos y asociaciones insuficientes, por lo que tendremos que rever nuestras conductas.

En cuanto a los financiadores de sistema de salud deberían cuidar la accesibilidad de los pacientes a la comunicación para la prevención, a los medios de diagnósticos, a los tratamientos y a los cuidados necesarios como la rehabilitación. Estos financiadores deben aceptar para sus afiliados las combinaciones de fármacos de acción prolongada en un solo comprimido, cuya indicación cuenta con evidencia científica.

En nuestro país, aproximadamente el 50% de los pacientes se asiste en el Sistema Público de Salud, con tendencia a incrementarse en el futuro por pérdidas de puestos laborales y de su cobertura médica. En cuanto a la accesibilidad a los tratamientos debo decirles que no existen combinaciones de fármacos en dosis fijas; solamente existe el tratamiento con monoterapia.

En el último congreso internacional, presentamos un trabajo que marca que en nuestro país en el tratamiento de la hipertensión, el 73% de los pacientes hipertensos son tratados con monoterapia y alrededor del 30% con combinaciones de fármacos, de los cuales sólo el 8% es con dosis fijas.

- ¿Cómo debería ser hoy el tratamiento de estos pacientes?

- El 70% de estos pacientes deberían ser tratados con combinaciones de fármacos en dosis fijas.

En el Sistema Público de Salud Argentino no disponemos de acceso a este tipo de tratamientos: Dentro de los financiadores de la salud, la gran mayoría de las obras sociales están a cargo del Estado Provincial, las que por regla general no financian los tratamientos con combinaciones de fármacos con dosis fijas.

A un paciente con hipertensión que además es diabético y sufre de colesterol alto, podríamos tratarlo con, a lo sumo, dos comprimidos por día en lugar de los 5 o 6 comprimidos que debemos prescribirle para alcanzar el tratamiento necesario.

Por otro lado está demostrado que cuanto más pastillas debe tomar el paciente menos adhiere al tratamiento.

La accesibilidad al Sistema de Salud y a los fármacos es un tema donde los financiadores de la salud y el estado, colocan un escollo.

Pensar que la adherencia al tratamiento es una cuestión del paciente es una simplificación peligrosa. El sistema de salud y los médicos deberíamos facilitar al paciente su adhesión al tratamiento que la atención de su enfermedad le demanda.

Como vemos hay muchos factores que atentan contra la adherencia al tratamiento.

- ¿Qué se puede hacer para revertir la situación tal como está contemplada en este momento?

- En estos días un colega de la provincia de Buenos Aires, acaba de presentar en la Obra Social Provincial, conocida por sus siglas: IOMA, que es la que cuenta con la mayor cantidad de afiliados, un proyecto para que esta Obra Social mencionada, que equivale a nuestro IAPOS, acepte las combinacionesde fármacos en dosis fijas para el tratamiento de los pacientes en los que, por sus patologías, requieren de las mismas para asegurar la adherencia al mismo.

Sería bueno que nosotros hagamos otro tanto en nuestra provincia ya que IAPOS no reconoce las combinaciones de fármacos en dosis fijas y hoy es imprescindible que los médicos podamos contar con estas combinaciones. A la pregunta de ¿por qué?, le respondo que, si quiero indicarle a un paciente severamente hipertenso tres fármacos que pueden ser un antihipertensivo, un bloqueante de los canales de calcio para que el paciente pueda estar vasodilatado y un diurético, le tengo que prescribir tres pastillas; hoy disponemos de siete marcas comerciales que aportan los tres componentes que los cardiólogos necesitamos para un hipertenso resistente, en una sola pastilla que se toma una vez por día; al no contar con esta posibilidad, los médicos debemos prescribir varios medicamentos que el paciente debe tomarlos durante todo el día con lo que pone en peligro su adherencia al tratamiento que como sabemos es imprescindible para controlar en los valores normales la presión arterial de ese paciente.

Las sociedades científicas deberemos hacer algún tipo de movimiento para llamar la atención de las autoridades y de la población en general para que se entienda que lo que está en juego es la adhesión a un tratamiento impostergable si se quiere que nuestra población acceda a la expectativa de vida a la que alcanzan los habitantes de los países desarrollados en el mundo.

Quiero aclarar que el resto del mundo no se acepta masivamente esta medida.

Hoy, el 90% de los pacientes hipertensos deberían recibir un tratamiento para reducir el colesterol ya que hoy está demostrado que un paciente 140 de presión sistólica, si se le agrega un medicamento para bajar el colesterol se reducen los eventos cardiovasculares tanto sean fatales como no fatales. Ésta es una evidencia científica y debemos ponerla en práctica para lo cual deberemos convencer a los financiadores de la salud. Ya existen medicamentos que en una sola pastilla concentran todo lo que ese paciente debe tomar.

No disponer estos tratamientos atentan contra la adherencia al tratamiento.

Insisto, también los médicos tenemos que indicar combinaciones de fármacos en dosis fijas. Los médicos deberemos convencernos que en el 80% de los pacientes con hipertensiones resistentes debemos indicar combinaciones de fármacos en dosis fijas por tratarse de la única manera de alcanzar las metas terapéuticas.

- ¿Estamos frente a un llamado que debería tener color rojo?

- Sí. Es un momento crucial. Por otro lado no hacer buena prevención para evitar las consecuencias de las Enfermedades Cardio Vasculares,, terminará generando mayor morbimortalidad y mayores costos al Sistema de Salud.

*Daniel Piskorz Médico Cardiólogo.
Especialista en Hipertensión Arterial, Matrícula, 8509;
integrante del Instituto de Cardiología del Sanatorio Británico
Consultorios del Británico, Jujuy 1540, Rosario