Swami Satyananda Saraswati, uno de los referentes más destacados del hinduismo en Europa, donde imparte regularmente sus conocimientos sobre la tradición primordial mediante cursos y seminarios, visita Rosario. Nació en Barcelona en 1955. En el año 1976, viajó a la India en busca de un maestro que le pudiera guiar hacia el camino de reconocimiento del Ser.

Rosario3.com pudo tomar contacto con el maestro Swami con quien establecimos el siguiente diálogo.

- ¿Qué es lo que diferencia a las diferentes escuelas y a los diferentes credos de oriente?

- En el hinduismo hay muchas escuelas, instituciones y maestros. Es una tradición basada en la libertad de la indagación, por lo que hay distintas concepciones; hay concepciones dualistas o teístas que consideran que hay una divinidad y nosotros como sujetos de ese dios creador; hay otras que consideran que nosotros somos parte de la divinidad; y hay otras, como la escuela a la que pertenezco, que considera que hay una conciencia que está más allá del nombre, de las formas, del nacimiento y de la muerte, que es anterior a todo, y posterior a todo. Es nuestra esencia, a la vez la esencia de todo que no cambia, que es el origen.

-¿Es lo que ustedes llaman lo REAL?

- Sí, lo REAL, “sat” sería la palabra; que significa existencia, realidad, Ser. Esto es lo real, aquello que nunca cambia. Y el proceso sería reconocer eso real en nosotros, más allá del cuerpo, más allá de la mente, que es la conciencia que nunca cambia.

- ¿Qué es el discernimiento para vuestra escuela?

- Discernimiento o viveka en sanscrito, el método para separar, discernir lo que es transitorio y momentáneo, de lo que existe y deja de existir, de lo permanente. Cuando hacemos un proceso de autoobservación o de discernimiento en nuestra propia realidad, en nuestra propia constitución para ir encontrando esta consciencia; éste es un proceso que utiliza la mente, aunque incluso debemos ir más allá de la mente, en un espacio de pleno silencio donde reconozco lo que soy.

- ¿La meditación sería el medio para alcanzarlo?

- Exactamente. Es el método más propicio. Ya que por la meditación intento aquietar los movimientos de la mente y en la medida que voy entrando en este silencio, la observación profunda de este silencio me lleva a reconocer una parte de mí que es anterior al pensamiento.

- ¿Occidente se está abriendo a oriente? ¿Es ésta su intuición?

- Sí y, a la vez, no. Creo que occidente se está abriendo a sí mismo. Estas indagaciones no son nuevas para occidente, cuántos místicos han tenido estas experiencias o estas percepciones. En la era precristiana, en las escuelas pitagóricas, muchos procesos eran similares; con la llegada de los monoteísmos, occidente pasó de las experiencias interiores a las religiones de la fe, a religiones de la creencia y el proceso de autoobservación o de discernimiento quedó como apartado.

- ¿El viaje hacia nuestro interior debe ser hecho de la mano de la meditación y del desapego?

- Sí. Cuando iniciamos el viaje hacia nuestro interior nos encontramos primero con la mente; pero luego debo dar un salto por medio de técnicas y entrar en el meditación; y en ella el discernir qué es lo que no cambia en este espacio: los pensamientos cambian, las emociones también; pero hay un silencio que no cambia. Éste es un reconocimiento que se está haciendo de a poco.

- ¿Buscamos los seres humanos la felicidad?

- Todos buscamos la felicidad, serlo con nosotros mismos. Muchas veces somos felices pero muy dependientes de otra persona, de una institución y cuando esto no nos satisface, nos sentimos muy infelices. Esto sería encontrar un espacio de plenitud en mi interior que no depende de nada ni de nadie. Desde este espacio actúo y me interacciono de forma más plena porque soy menos dependiente. Éste es justamente la diferencia entre la persona establecida en este proceso de la que no ha logrado salir de su dependencia.

- ¿Las personas que lo logran viven con mejor salud?

- No hay dudas. Uno de los efectos es la salud, sin duda. Mi maestro se preguntaba ¿Por qué enfermamos? Y se respondía porque comemos demasiado o mal; porque pensamos en exceso; sobre todo cuando no logramos pensamientos luminosos, positivos, armoniosos.

- ¿Estamos como enredados por las culpas del pasado y la ansiedad por las expectativas futuras?

- Estamos atrapados por esta rueda y raramente tocamos la belleza que nos ofrece cada instante.

- ¿Qué significa tu nombre?

- Swami es un término respetuoso que implica una persona que ha dedicado su vida a este proceso, como un monje. Satyananda: está integrada por dos palabras, ananda que significa felicidad y satya de la realidad, de lo que es verdad; sería la dicha de la verdad. Saraswati, se refiere a la diosa del conocimiento y es el nombre de la orden monástica a la que pertenezco.

---

Adhiriendo al Día Internacional del Yoga, que se celebra este viernes 21 de junio, la Universidad del Gran Rosario a través de su carrera Yoga y Salud integral organiza una conferencia: “El Yoga sublime de la Bhagavad Gita”, que dictará el maestro Swami Satyananda Saraswati; en la Sede de Gobierno de la UNR en Maipú 1065, a las 18 horas.