El fiscal regional interino Matías Merlo ordenó en la mañana de este miércoles reabrir la causa contra Gustavo Albertelli, el dueño de una conocida rotisería de Rosario que en noviembre del año pasado estuvo involucrado en un siniestro vial en el túnel Celedonio Escalada, donde falleció el cadete Hernando Fredes. La investigación, que había sido archivada por el fiscal Walter Jurado, ahora estará abocada a la realización de medidas solicitadas por la querella

La medida dispuesta por el jefe de fiscales interino de Rosario dará una ventana de tiempo para llevar a cabo algunas pericias que había pedido Ignacio Carbone, a cargo de la asesoría legal de la familia de la víctima. Luego de que finalicen las tareas, el fiscal resolverá si la causa sigue abierta o si pasa al archivo nuevamente

A principios de este mes, el fiscal Walter Jurado, que había intervenido en el expediente, había resuelto archivar las actuaciones al considerar –sobre la base de un testigo ocular y peritajes solicitados– que el motociclista supuestamente había derrapado con su vehículo, había invadido el carril contrario y había impactado contra la camioneta del empresario. 

Jurado, a su vez, interpretó que la conducción de Albertelli, que estaba bajo los efectos de alcohol, no fue determinante en el resultado fatal.

El pedido de justicia de la madre del cadete (Alan Monzón/Rosario3)

Albertelli –que tenía 0.88 gramos de alcohol en sangre, según el análisis– fue aprehendido minutos después del siniestro vial fatal en Rodríguez y Jujuy porque había abandonado la escena. Luego, fue imputado por homicidio culposo y quedó en libertad, tras pagar una caución de 30 mil dólares, entre otros requisitos impuestos por el juez Carlos Leiva en el marco de un acuerdo de partes.

La causa tuvo su correlato extrajudicial con encendidos pedidos de justicia y escraches al local de comidas del imputado.

El cadete Fredes estuvo muy complicado de salud hasta que falleció el 10 de diciembre por “complicaciones multiorgánicas por traumatismo de tórax”.

El "alivio" de la familia

 

Luego de que reabrieron la causa, la familia de Andrés Fredes, el cadete fallecido, sintió que tiene "una nueva esperanza". 

"Estamos aliviados, pensamos que nos íbamos a ir con las manos vacías. Estamos más tranquilos, tenemos algo de esperanza. Tratamos de confiar en la justicia, pero siempre nos daban la espalda", dijo Javier, hermano de la víctima.

"Si se reabre es por algo, nosotros tenemos las pruebas, no estamos inventando nada, tenemos al testigo del video y está dispuesto a declarar", sumó.

Luego, apuntó contra el conductor de la camioneta que lo atropelló, quien está en libertad: "Es un asesino, él estaba borracho, dejó abandonado a mi hermano y se dio a la fuga. Además hizo sus chanchullos queriendo tapar todo con dinero".

Finalmente, Javier sentenció: "Tienen que cambiar las leyes respecto de los siniestros de tránsito: 4 o 5 años no es nada cuando se llevan una vida".