Hace unos 30 años que la familia Farías vive en un casa de Rioja al 600. Allí Beatriz y Anselmo criaron a sus cuatro hijos y allí viven aún con uno de ellos, su pareja y sus nietos. Pero temen perder la casa. Una fundación de la Iglesia se las reclama desde hace siete años y desde entonces están en un constante tire y afloje. Hasta este miércoles, cuando se presentó un grupo de policías con la orden de desalojo.

En contacto con Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra por Radio 2, Juan Martín Farías contó del miedo con el que vive su familia desde 2010 y que esta mañana tomó la forma. Miedo a perder su casa, esa en la que creció y en la que crecen ahora sus sobrinos menores de edad.

La vivienda la habían comprado sus padres de palabra a una mujer soltera y sin hijos a la que le alquilaban además un local también en el centro. Se la pagaron en cuotas y como comprobante solo tienen el recibo de la escribana que redactó el boleto de compraventa y que data de 1990.

Como la mujer había hecho voto de pobreza, el dinero de las cuotas se los regalaba a sus sobrinos quienes, aseguró Juan Martín, confirmaron la transacción. 

El reclamo de la Obra Cardenal Ferrari –una fundación eclesiástica que dependen del arzobispado porteño– se basa en un testamento de la dueña de la casa realizado un año antes de la venta. Sin embargo, la familia considera que una vez vendida la propiedad la donación quedó "sin efecto".