Como cada una de las últimas lluvias en Rosario, la de este martes volvió a causar serios problemas en las calles. El barrio Empalme Graneros fue ahora el más afectado, con el agua que al mediodía llegaba hasta algunas viviendas. Desde el municipio asumen su responsabilidad pero remarcan que buena parte de la higiene de la ciudad depende de cada vecino. El móvil de El Tres mostró cómo quedan las bocas de tormenta cuando el agua drena.

“Recomendamos no dejar la basura al costado del contenedor porque pueden pasar algunas horas hasta que se preste el siguiente servicio de recolección”, dijo en Radio 2 el director general de Higiene Urbana, Luciano Marelli, en relación a una mala práctica repetida. “Igualmente no eludimos nuestra responsabilidad”, aclaró.

En el programa La primera de la tarde, el funcionario recordó que "nos rige la ordenanza Nº 7.600, que especifica responsabilidades para el municipio y también para los ciudadanos” sobre las prohibiciones de arrojar residuos en la vía pública. “Pero no puede haber un inspector detrás de cada ciudadano”, dijo, apelando a la conciencia colectiva.

En el barrio del Abasto había varias calles anegadas.
Barrio del Abasto, otro que también siempre sufre consecuencias. (archivo Rosario3.com)

"En general el rosarino es cuidadoso con los espacios públicos –destacó–; hemos aprendido a proceder, pero siempre es importante reforzar los hábitos de conducta y convivencia".

En ese sentido, detalló que "la ciudad tiene 9.500 contenedores distribuidos en todos los barrios”, lo que “cubre el 70 por ciento” de la superficie del municipio. Las recolecciones son seis por semana y el servicio de barrido, entre tres y seis dependiendo de cada lugar.

Sin puntualizar en ningún sector en especial, Marelli analizó que los anegamientos se vienen produciendo sólo “con lluvias muy intensas en muy poco tiempo” y que los problemas de agua acumulada “son transitorios pero luego drena con normalidad”.

Mugre que tapa

Una recorrida del móvil de Telenoche (el Tres) mostró cómo quedan de tapadas y sucias las entradas de las bocas de tormenta que hay en muchas esquinas de Rosario. Una vez que el agua drena, queda en evidencia la gran cantidad de basura, en buena parte residuos domiciliarios, que obstruye y evita un normal desagüe.

Más cuadrillas

El lunes, luego de las abundantes precipitaciones del domingo último, Aguas Santafesinas SA alertó sobre las tareas de limpieza que tuvo que desarrollar en los desagües para permitir que el agua escurriera y sus autoridades se reunieron con la intendenta Mónica Fein para evaluar la situación ante las constantes lluvias de la época.

La mandataria local dijo que hubo un compromiso “a incrementar las cuadrillas de limpieza” pero subrayó que “al mismo tiempo, es vital la colaboración de todos los rosarinos en la higiene urbana, no dejar los residuos fuera de los contenedores y por sobre todas las cosas no arrojar basura en la calle”.

Si bien las lluvias en Rosario se tomarían un descanso durante este miércoles, hay pronóstico de mal tiempo nuevamente para el jueves.