El crecimiento económico de los hermanos Vignati estuvo vinculado a los lazos con Venezuela. Un informe que este miércoles presentó Telenoche (El Tres) indicó que hasta el 2009, ninguno de los integrantes de la familia tenía participación accionaria en empresa alguna.

Roberto era un simple empleado de Talleres Marisa SRL, una fábrica de silos de Arteaga fundada por su abuelo materno. En ese rol empezó a viajar a Venezuela, donde cerró desde 2008 los primeros negocios con la empresa Leguminosas del Alba SA.

En 2012, comenzó a actuar como intermediario en el último tramo de exportaciones de maquinaria agrícola acordado por ambos gobiernos.

El gran golpe lo dio un par de años después, cuando logró exportar miles de toneladas de arroz y maíz a ese país con notables sobreprecios de hasta el 80%. Esas operaciones se hicieron a través de la empresa Bioart SA, la primera sociedad de la que participan los hermanos.

De Bioart SA ya no quedan rastros: por las sospechas la borraron de un plumazo. El nuevo conglomerado se llama Grupo Gens y agrupa una decena de empresas fundadas o adquiridas por los empresarios ligados a De Vido en los últimos 5 años.

El informe que presentó Telenoche: