El inicio de la escolaridad primaria es una etapa de muchos cambios para los niños, que se relaciona con los aspectos emocionales y cognitivos; y requiere de procesos de adaptación acompañados por los adultos responsables de su crianza, según publica grupoorono.

Para lograr aprendizajes nuevos deben poder sostener su atención, por ello, observar indicadores importantes durante los momentos relevantes del crecimiento y desarrollo permite actuar desde la prevención y para la intervención oportuna en las alteraciones visuales, auditivas linguísticas, cardiovasculares y de la salud bucal.

Por todo esto, es un buen momento para realizar la consulta al pediatra, quien se encargará de un exámen físico completo y extenderá el certificado de salud.

Muchas veces, algunos de los trastornos del aprendizaje no se relacionan con los aspectos cognitivos sino con dificultades en la visión y-o audición. Es importante abordar todo esto de manera preventiva para poder intervenir antes que se vea afectado el aprendizaje.

¿Qué observamos?

Visión

Se examina desde que el niño nace y en cualquier otro momento que se detecte alguna dificultad. Entre los 5 y 6 años es importante que el especialista analice la agudeza visual y todo lo que considere necesario dado que se afianza la lectoescritura.

Lenguaje y audición

La audición también se evalúa desde el nacimiento a partir de diferentes estudios; pero es un buen momento para que el fonoaudiólogo observe las posibilidades auditivas y la organización del lenguaje ya que el niño lo utiliza como una habilidad en función social.

Por ello, es indispensable que el proceso de adquisición del lenguaje se organice en tiempo y forma para permitir el acceso al aprendizaje de un segundo código como es la lectoescritura.

Odontología

La salud bucal es de vital importancia en esta etapa, por eso es necesario concurrir al odontólogo desde la primera infancia para aprender hábitos de higiene y para que el profesional pueda orientar la necesidad de tratamiento temprano considerando alteraciones relacionadas con caries , con el recambio dentario y la prevención de alteraciones en la oclusión.

Examen cardiovascular

Es un buen momento para concretarlo ya que comienzan a realizar actividad física con más intensidad. Los niños necesitan moverse y compartir actividades deportivas y recreativas según cada edad, ya que el sedentarismo propio de las pantallas de hoy en día no favorece el desarrollo de un niño sano.

Inmunizaciones

También es obligatorio colocarse las vacunas que corresponden al ingreso escolar, lo cual se contempla en el Programa Argentino de inmunizaciones. Se pueden realizar en instituciones públicas o privadas.

Existen vacunas no obligatorias que el pediatra de cabecera evaluará cuándo colocarlas.

Nutrición y rendimiento escolar

Es un tema importante dado el incremento de algunas patologías como la obesidad infantil muy relacionada con el sedentarismo y la malnutrición.

Existen en el mercado productos muy calóricos con pocos nutrientes , como las bebidas gaseosas, que los niños consumen con mucha frecuencia y en cualquier horario.

La alimentación debe ser variada y los horarios ordenados. Es indispensable que no ingresen al colegio sin desayunar ya que el desayuno es una de las ingestas más importantes del día y debe adaptarse a cada gusto, necesidad y tolerancia de cada niño.

La importancia del mismo favorece a la concentración y al rendimiento escolar ya que sostiene niveles adecuados de glicemia.

En la consulta médica evaluamos el crecimiento y desarrollo de cada niño, teniendo en cuenta la edad, la altura y el peso. Se registran estos datos en las curvas de crecimiento valorando si se encuentra dentro de los parámetros para cada edad.

Por lo tanto la solicitud del certificado escolar es una oportunidad para observar al niño integralmente y atender algún indicador de salud importante para derivar al especialista y realizar un abordaje interdisciplinario.

Cada niño es una persona única y debe ser tratado como tal; no compararlo con otro niño y respetar sus deseos, inquietudes , fomentar sus logros, tolerando sus tiempos y necesidades. El ingreso escolar, por lo tanto, es un buen momento para visitar al pediatra de cabecera para que se extienda , de esta forma , el certificado escolar.