Este fin de semana en Santa Fe capital, una mujer llevó a su hija recién nacida muerta en una caja de zapatos. En otra llevaba su placenta. Ahora se logró determinar que la chiquita nació con vida y que murió a causa de varios golpes. La Fiscalía imputó a la madre por homicidio. Este viernes se realiza la audiencia para definir medidas cautelares.
“El homicidio de la beba fue cometido alrededor de la 1.30 de la madrugada del viernes 8 de febrero en una casaquinta ubicada en jurisdicción de la localidad de Desvío Arijón”, reconstruyó el fiscal Marcelo Nessier, según publicó el diario santafesino El Litoral.
De acuerdo al relato del fiscal, la mujer dio a luz por parto natural a la beba en su casa, con sus padres y una pareja amiga que presuntamente desconocían el embarazo.
“Se descarta totalmente y de plano la posibilidad de un aborto. Las pruebas médicas realizadas confirmaron que los pulmones de la beba tenían oxígeno, esto quiere decir que respiró y por eso se trata de una persona nacida viva”, agregó y señaló que “la víctima sufrió golpes que le provocaron dos fracturas, un edema cerebral y lesiones politraumáticas múltiples y severas en distintas partes del cuerpo”.
En tal sentido, Nessier y la fiscal Rosana Marcolín le atribuyeron a la madre la autoría del delito de homicidio calificado por el vínculo.
Nessier y Marcolín pidieron que la mujer se someta a un estudio psicológico pero la Defensa lo rechazó.
