¿Se puede diagnosticar precozmente el autismo con un análisis de sangre? Parece que ser sí, según los resultados de un estudio del Instituto Politécnico Rensselaer (EE.UU.) que se basa en un algoritmo capaz de predecir si un niño tiene un trastorno del espectro autista (TEA) que analiza los metabolitos en una muestra de sangre. El estudio se publica en "Bioengineering & Translational Medicine" y lo cita el portal abc.

Una prueba fisiológica que respalde el proceso de diagnóstico de un médico tiene el potencial de reducir la edad a la que se diagnostica a los niños, lo que facilita un tratamiento más temprano. "Analizamos grupos de niños con TEA de un estudio previo y tuvimos un éxito similar. Podemos predecir con una precisión del 88% si los niños tienen autismo", explica Juergen Hahn, autor principal del trabajo.

Se estima que aproximadamente el 1,7 por ciento de todos los niños es diagnosticado de TEA, que se caracteriza por una discapacidad del desarrollo causada por diferencias en el cerebro. Se sabe que, por normal general, un diagnóstico precoz conduce a mejores resultados a medida que los niños participan en los servicios de intervención temprana. Y aunque se puede establecer un diagnóstico a los 18-24 meses de edad, sin embargo, dado que depende únicamente de las observaciones clínicas, a la mayoría de los niños no se les diagnostica hasta después de los 4 años de edad.

"El resultado más significativo es el alto grado de precisión que podemos obtener utilizando este enfoque", señala Hahn-. El siguiente paso es validarlo en una ensayo clínico y su comercialización.