La empresa Apple anunció una actualización de software para los iPhone 6, 6 Plus, SE, 6S, 6S Plus, 7 y 7 Plus que permitirá desactivar la función de "ahorro de batería". Esta herramienta provocaba que los smartphones funcionaran más lentos. La medida tiene lugar en el marco del lanzamiento del sistema operativo móvil iOS versión 11.3, prevista para este año.

La firma, con sede en Cupertino, sostuvo que la función "administra de forma dinámica el rendimiento máximo para evitar apagones inesperados", pero aclaró que las personas podrán "desactivarla". 

El anuncio tiene lugar luego de que el mes pasado Apple reconociera y pidiera disculpas por ralentizar de forma intencional modelos de iPhone "antiguos" (entre ellos las versiones 6, 6S y 7 del smartphone), con el argumento de que lo hacía para "prolongar la vida útil" de los dispositivos.

Un vocero de la empresa había explicado que cuando una batería está en mal estado, era posible que no pudiera suministrar la máxima corriente requerida por el procesador del teléfono a toda velocidad. En ese caso, el iPhone podía cerrarse inesperadamente para proteger los componentes internos. 

Pero la consideración de "antiguos" de estos modelos es relativa: si bien el iPhone 6 fue lanzado en septiembre de 2014, el 6E llegó al mercado en septiembre de 2015 y el SE lo hizo el 31 de marzo de 2016.

Por eso la explicación de Apple fue tomada con cierto escepticismo por críticos y expertos, muchos de los cuales denuncian que la empresa viene haciendo esto desde hace años, y ven en la ralentización una jugada de Apple para que sus clientes compren los modelos más nuevos.

De hecho, la asociación francesa de defensa de derechos de consumidores HOP (del francés "Detener la Obsolescencia Programada") inició acciones legales contra la firma estadounidense por acelerar el proceso de envejecimiento de sus productos para estimular la demanda. Al igual que sucedió en los Estados Unidos con una serie de ocho demandas colectivas.