La policía federal de Brasil imputó este jueves al expresidente Jair Bolsonaro y a otras 36 personas por intentar un golpe de Estado para mantenerlo en el cargo tras su derrota electoral contra Lula da Silva en las elecciones de 2022.
Los resultados de la investigación serán entregados al Supremo Tribunal de Brasil para ser remitidos al fiscal general Paulo Gonet, quien decidirá si está de acuerdo con las acusaciones y si somete a juicio al expresidente o si desestima la investigación.
Según precisaron, existen indicios suficientes de que existió una "organización criminal" que actuó de "forma coordinada" en 2022 para mantener a Bolsonaro en el poder. A su vez, piden que el ex Jefe de Estado brasileño y los otros investigados sean imputados por abolición violenta del Estado democrático de derecho, golpe de Estado y organización criminal, delitos que sumados reúnen penas de hasta 30 años de cárcel.
En la lista aparecen militares de alto perfil, como el exministro de Defensa, general Walter Souza Braga Netto, y el exministro jefe del Gabinete de Seguridad Institucional, Augusto Heleno. También, el exministro de Justicia Anderson Torres y el exdirector de la Agencia Brasileña de Inteligencia y diputado federal, Alexandre Ramagem.