El padre de un joven con autismo denunció este martes que el hogar donde vive su hijo desde hace 16 años no le permitía reingresar por haber estado internado en el Ipam, el centro médico donde trabaja una enfermera que dio positivo de coronavirus. Luego de una denuncia por abandono de persona y de  esperar más de tres horas en una ambulancia fuera del centro, Eduardo pudo volver a entrar.

El papá del paciente contó al programa Telenoche Rosario (El Tres) que su hijo tuvo que someterse a una intervención quirúrgica menor en el centro médico Ipam y una vez obtenida el alta médica cumplió un estricto protocolo de salud que incluyó entre otras cosas un hisopado que dio negativo de covid-19.

Cerca de las 15.30 de este martes llegó a las puertas del hogar de Entre Ríos al 5800 donde vive desde hace 16 años pero le exigían un segundo hisopado.

La subdirectora del establecimiento explicó que siguen medidas definidas a nivel provincial y nacional y que ante el aislamiento exigido el paciente no puede quedarse solo en una habitación porque corre riesgo su vida.

Finalmente, cerca de las 19 pudo entrar tras la denuncia de abandono de persona que incluyó intervención policial. El papá del joven, dio testimonio a Telenoche y dijo: “No sé por qué tanto problema, yo traje todo lo que ellos pidieron”.