En su última semana de gestión, la directora del Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Ruaga Santa Fe), Magdalena Galli Fiant hizo un repaso de lo trabajado desde que asumió en enero de 2020. Recordó aquel año difícil en que se frenaron las adopciones, luego la “explosión” de interesados en 2021, y destacó el trabajo sostenido en estos últimos dos años, así como la campaña de Adopción +10 para incentivar a animarse con los chicos más grandes y adolescentes.

En una entrevista con Rosario3, Galli Fiant destacó que entre sus últimas gestiones, se encuentra en la última campaña del año, ya que hasta este domingo 10 de diciembre se puede realizar una inscripción al registro de interesados en adoptar, que se hace llenando un formulario online. Luego se hacen encuentros informativos con los interesados en adopción. 

Con la satisfacción de haber comandado “sostenidamente” el área que se aboca al encuentro entre familias monoparentales o parejas que desean comprometerse en adoptar, con decenas de niños y adolescentes que esperan ser cuidados en una familia, Galli Fiant aseguró que “en el último año hubo un crecimiento de más del 10 por ciento de adopciones”.

Entre los índices que manejan en el Ruaga, compartió: “En números que llegan al 30 de noviembre pasado, en cuanto a sentencia de guarda adoptiva, el año pasado teníamos 60 chicos, y este año son 71. Y sentencias de adopciones, en 2022 fueron 33, y al día de hoy justo son 33 también. Aunque ahora durante diciembre hay algunas adopciones que están por salir, por lo que el numero superará al del año pasado. Hubo un número sostenido, tanto de guarda como de adopciones, con un pequeño crecimiento del año pasado a este”.

Los seis hermanitos correntinos y las convocatorias como última gran instancia

Consultada en torno a la historia de los hermanitos correntinos, Galli Fiant aclaró que las madres fueron evaluadas desde el Ruaga de Corrientes, donde se inscribieron en la convocatoria pública, por lo que no fue una adopción en la que Ruaga Santa Fe haya intervenido.

Explicó que “el tipo de adopción de esta nueva familia que ahora reside en la localidad santafesina de Luis Palacios, responde a lo que es la última instancia de las opciones de adopción: "Cuando se buscó entre las familias inscriptas y no se encontró, la convocatoria se decide hacerla públicamente, con este tipo de campañas nacionales y en medios, y en estas, la gente que no estaba inscripta desde antes en Ruaga, puede inscribirse”.

Fue entonces que la directora saliente del Ruaga Santa Fe contó que en este territorio hay “más de 70 chicos que se encuentran en la convocatoria pública”. Y destacó: “Tenemos muchas convocatorias de este tipo en la web oficial. Y en esta última semana de mi gestión justamente subimos la convocatoria para adoptar a una chica de 17 años”.

Entonces detalló que “en Santa Fe no son grupos numerosos de hermanos, como fue el caso de los seis correntinos. A lo sumo hay algunos grupos de dos hermanos, que siempre buscamos que permanezcan juntos”.

El embudo histórico entre adoptantes y los niños, y la campaña “Adopción +10”

Casi el 70 por ciento de los que esperan en la convocatoria abierta, destacó Galli Fiant, “son niños que superan los 13 años”, ya que, al inscribirse las familias interesadas, en muchos casos suelen interesarse en adoptar a bebés o niños pequeños. “La caída de inscriptos para adoptar a chicos más grandes es muy abrupta”, sentenció.

Sobre esto, analizó que se trata de “un problema histórico el asunto de que la mayoría de las parejas o personas que buscan adoptar, quieren un niño mas chico. Y se demoran las búsquedas para los adolescentes, quienes al cumplir 18 años ya no pueden seguir buscando familia por su mayoría de edad”.

De esta forma, quedan dificultados en conseguir hogar “muchos chicos de 12 años que no presentan necesidades especiales, muchos casos son los hermanos mayores de un grupo de hermanos que consiguieron ser adoptados".

En general, destacó que se busca que los hermanos permanezcan unidos, pero si pasa mucho tiempo que no conseguimos una familia que acoja a todos juntos, se piensa reagruparlos entre ellos, y se les busca familia separados. Por ejemplo, ahora se está en proceso de cuatro hermanitos, que van a ir dos a una familia y los otros dos a otra”.

Para paliar el problema de embudo que se genera con la cantidad de chicos que esperan adopción, desde Ruaga “cada vez que hay una situación de adoptabilidad se comunica a todos los inscriptos, por más que algunas solo buscaban más pequeños o que solo quieran adoptar a uno. Lo hacemos porque vemos que se logra así muchos encuentros”.

Finalmente, destacó que este año comenzó una campaña para adoptar a chicos más grandes, llamada “Adopción +10”. Y sobre esta expresó de cara a una nueva gestión del Ruaga: “Nos gustaría que la nueva gestión continúe y haga crecer la campaña”.

Repaso desde el freno total de la pandemia y la “explosión” de adoptantes posterior

Consultada sobre cómo se transcurrieron los cuatro años de su gestión, que a poco de comenzar se reconfiguró con el encierro que conllevó la pandemia del Covid-19, Magdalena Galli Fiant recordó: “A poco de comenzar la gestión, en pandemia, la oficina cerró un mes y medio, y luego desde mayo se volvió a trabajar en formatos rotativos de lo que llamaban burbujas presenciales y vía virtual. Pero como las adopciones son una cuestión legal, y por esto, ese año fue muy complicado porque los Tribunales no tenían actividad judicial”. 

De esta forma, si bien reconoció que “fue un inicio de gestión accidentado”, también destacó: “Aprovechamos ese tiempo a organizar la gestión y creamos un registro de nuevos aspirantes más ordenado y de más encuentros informativos”.

Con la reapertura y regreso a la llamada “nueva normalidad”, la referente del Ruaga de Santa FE destacó lo que fue un gran año para las adopciones: “Llamó la atención cómo en 2021 hubo una «explosión» de inscriptos. Pienso que fue por la contención del 2020 de los interesados, y que muchas familias que tenían el deseo de adoptar, pensaron seriamente y lo concretaran. No habíamos vivido nunca una pandemia y sintieron que es ahora porque sentían que no hay futuro. Ese año firmamos 200 inscripciones nuevas para adoptar”.

Cierre de gestión

Magdalena Galli Fiant analizó en sus últimos días al frente del Ruaga Santa Fe: “Estos años fue un placer trabajar en las adopciones, que es un tema de mi interés desde siempre pero que nunca antes había estado en un rol en el Estado. Estoy agradecida con los equipos que he trabajado en toda la provincia. Es un trabajo de mucho compromiso, donde se pone el cuerpo y el corazón”.

A futuro en el Ruaga, compartió su deseo de “que la próxima gestión ponga los recursos necesarios y esfuerzos en todas las áreas que competen a las necesidades de los niños, sobre todo de recursos humanos de calidad”.

Aseguró que ahora volverá al trabajo académico, el cual tuvo más relegado. “Vuelvo a ejercer como abogada, y soy docente en Derecho de Familia en la Universidad Nacional del Litoral y en la Universidad Católica de Santa Fe, también dirijo el Posgrado de Familia”, finalizó.