En Rosario, se prevé una adhesión de trabajadores estatales y del transporte y una movilización al Monumento a la Bandera hacia el mediodía. En tanto, en Buenos Aires tiene lugar la mayor concentración en el Congreso, a las 15. La CGT se reunió el lunes con funcionarios de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires y de la Policía Metropolitana para "consensuar cuestiones de seguridad y organización" de la jornada y garantizar "el pacífico desarrollo del acto".

Las columnas de trabajadores ingresarán por la Avenida de Mayo desde la avenida 9 de Julio hacia la Plaza del Congreso, y se garantizará la circulación de los bomberos, ambulancias, vehículos con emergencias y el ingreso y egreso de frentistas en toda la zona.

La CGT reclamó a las autoridades porteñas "un estricto control sobre el accionar de las fuerzas de seguridad operativas en el lugar para garantizar el desarrollo pacífico del acto, sin incurrir en provocaciones y/o agresiones y a la totalidad de los trabajadores".

La protesta se repite en las provincias, donde las filiales de la CGT y las otra centrales, junto con organizaciones sociales y políticas, también realizarán marchas y otras modalidades de protesta contra la política del gobierno nacional. El transporte público de pasajeros funcionará hasta las 19 para aquellos que quieran participar en la marcha y luego desconcentrar hacia sus hogares.

En tanto, desde el Ministerio de Seguridad de la Nación reiteraron que "se encuentra plenamente vigente" el "Protocolo para el mantenimiento del orden público ante el corte de vías de circulación", por lo cual está "absolutamente prohibido realizar corte de artería o vía de circulación alguno", y ratificó que se harán controles en micros y estaciones de trenes.

La cartera de Patricia Bullrich advirtió además que "en virtud del comunicado emitido por la CGT, se aclara a la ciudadanía que la agrupación sindical no posee capacidad ni se encuentra habilitada para asegurar, autorizar o restringir ningún tipo de circulación, siendo las autoridades gubernamentales las únicas con potestad para realizar dichos controles, los que serán aplicados bajo estricto control y conforme las pautas ya notificadas oportunamente".

En ese sentido, Seguridad le recordó a la ciudadanía que "el 'Protocolo para el mantenimiento del orden público ante el corte de vías de circulación' se encuentra plenamente vigente" y que "a fin de asegurar el derecho a circular y movilizarse libremente para todo aquel que así lo necesite y desee, el protocolo referido será aplicado por los organismos competentes".

Además, ratificó en un comunicado que "se realizará un control estricto de todos los micros afectados a la marcha; se realizarán controles en las estaciones de tren; se realizarán controles en lo que hace a la concentración propiamente dicha y se encuentra absolutamente prohibido realizar corte de artería o vía de circulación alguno".

Horas más tarde, un juez federal de La Plata hizo lugar a una acción de habeas corpus preventivo y ordenó a las autoridades del Ministerio de Seguridad de la Nación que -en el ámbito de la jurisdicción de ese tribunal- se abstengan de emitir órdenes para que las fuerzas federales filmen o intercepten personas en transportes públicos, cuando se desarrollará el paro y la movilización contra la política del Gobierno convocados por la CGT, informaron fuentes judiciales.

En otro orden, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, le sugirió al secretario adjunto de la Federación de Camioneros y dirigente de la central obrera, Pablo Moyano, que si "quiere lleve a los trabajadores a upa" a la concentración que se realizará en Plaza Congreso.

“Moyano que los lleve a upa si quiere, que los lleve como quiera, pero nosotros vamos a hacer cumplir el protocolo todo lo que podamos. Es nuestra obligación decirle a la sociedad que está liberada de ver, cuando se levanta, si hay un piquete o no”, señaló Bullrich en declaraciones a la radio Urbana Play.

De esta forma, la funcionaria replicó dichos del dirigente camionero, quien en un cuestionamiento al protocolo de orden público del Ministerio de Seguridad planteó que para cumplir el protocolo debería llevar a "los 40.000 trabajadores de su gremio" que se movilizarán el miércoles "en fila india o en upa".

“Vamos a liberar al pueblo argentino de esta situación para que realmente se pueda tener un país que no tenga 9.000 piquetes por año”, remarcó la ministra sobre el criterio que sigue su gestión ante las protestas en la vía pública.

La cuenta

Bullrich también sostuvo que el gobierno “le mandará la cuenta” a las organizaciones que no cumplan el protocolo durante la movilización convocada por la CGT, en lo que será la primera medida de fuerza convocada por la entidad sindical contra el gobierno de Javier Milei.

“Uno tiene que hacerse cargo de sus actos es un país que necesita salir, porque estamos en una crisis muy fuerte. Habrá una gran cantidad de gente que va a aprovechar que habrá transporte para ir a trabajar”, observó.

En este sentido, la funcionaria anticipó que el Gobierno trabajará para que “la gente tenga la mayor normalidad posible, tratando de que si ellos van al Congreso, las calles aledañas no estén totalmente tomadas”.

Bullrich calificó el paro como “una reacción desmedida, cuando (la CGT) venía de dormir la siesta durante años”, en relación a la postura que la central obrera tuvo durante el gobierno de Alberto Fernández.

“Vamos a usar todos los medios para que Argentina sea un país donde se pueda convivir”, concluyó la ministra.

Contra el DNU

 

Las centrales obreras y otros espacios ratificaron su total oposición a la sanción del decreto de necesidad y urgencia (DNU) 70/23 y al proyecto de ley "Bases", a pesar de sus modificaciones, porque, afirmaron, "atentan contra los derechos laborales y todas las conquistas". "Se trata de un ataque salvaje que afecta a los sectores más vulnerables y a los trabajadores y procura quitar derechos laborales y jubilatorios", dijeron las centrales.

Otro reclamo que en las últimas horas se sumó a la protesta de hoy es la decisión del Poder Ejecutivo de enviar al Parlamento un proyecto de ley de restitución del pago de Ganancias, ahora denominado Impuesto a los Ingresos Personales, que abarcaría a todo aquel que supere un ingreso de 1.350.000 pesos bruto.

Este martes, Héctor Daer, cotitular de la CGT, expresó que la protesta de hoy tendrá gran adhesión porque "la gente tiene bronca", lo que "trascendió al movimiento obrero para alcanzar a varios sectores de la sociedad", y añadió que existe "decepción".