Según un reporte de la UNESCO, los efectos de la pandemia por el Covid-19 perdurarán «por muchos años» en la educación de América Latina y el Caribe, este estudio advirtió en, donde se recomendó aplicar políticas «integrales» para acelerar la recuperación en materia educativa en la región.

El estudio llamado “La urgencia de la recuperación educativa en América Latina y el Caribe”, publicado por la Oficina Regional Multisectorial de la UNESCO, puntualiza en la magnitud del retroceso en educación causado por el COVID-19 en sus diferentes dimensiones, y afirma que, si los países no adoptan una respuesta sistémica e integral, las consecuencias de la crisis afectarán por muchos años el aprendizaje del estudiantado de la región.

Los datos revelan que durante la pandemia se vio una caída en las tasas de asistencia en todos los niveles educativos, sobre todo en 2020, con mayor afectación en la educación preprimaria. Sólo en ese nivel la asistencia se redujo del 86,2% al 79,2% entre 2019 y 2020, en el promedio de los países.

Los efectos de la pandemia en la educación

Con datos que preocupan, las evaluaciones muestran resultados dispares, con una mayoría de países que manifiestan un retroceso en los niveles de aprendizaje de magnitudes variables. Mostrando que los desempeños de los estudiantes de la región son bajos en relación con otros países del mundo, y no muestran mejoras en la última década: poco más de la mitad de los estudiantes de 3er grado de primaria alcanzan niveles mínimos de competencia, y se observa un declive en sexto grado.

En cuanto a la secundaria baja, apenas un tercio logra niveles mínimos de competencia en matemática, resultados que se mantienen constantes al menos desde el 2015.

También se reconoce que la situación de poblaciones afectadas por desigualdades históricas que se reflejan en el acceso y calidad de la educación que reciben (en situación de pobreza y extrema pobreza, poblaciones indígenas, población rural), a las que se suman otros grupos para los que no hay estimaciones regionales, como personas en situación de movilidad humana o con discapacidad.

En este sentido, pese a que los gobiernos impulsaron múltiples acciones para enfrentar estas adversidades, el diagnóstico indica que se acrecentaron las deudas en aspectos clave de cumplimiento del derecho a la educación de los niños, niñas y adolescentes.

Un desafío de cara al futuro

Dentro de los temas prioritarios de atención que el documento hace hincapie, también se alerta sobre la importancia de trabajar en el bienestar socioemocional de las comunidades educativas. Se llama a continuar fortaleciendo las estrategias, planes y programas para el acompañamiento y la contención emocional dentro de ellas.

Desde el organismo revelaron que a pesar de los esfuerzos de múltiples acciones de políticas públicas educativas, la recuperación de aprendizajes sigue siendo una deuda abierta.

Con este desafío, la UNESCO propone desarrollar un marco de recuperación y aceleración de los aprendizajes en América Latina y el Caribe que incluya los ejes de inclusión educativa, mejora de los aprendizajes, fortalecimiento de la docencia y de las capacidades de gobernanza y financiamiento de los sistemas educativos de la región.