Los caminos de Newell's y Mauro Formica no volverán a cruzarse. Al menos no por ahora. Es que el Gato logró salir de Pumas de México y está con el pase en su poder, pero el ofrecimiento leproso no llega siquiera a arrimarse a sus pretensiones salariales y seguirá en otra entidad.

El futbolista no iba a ser tenido en cuenta en el inicio de la temporada y logró lo que la dirigencia rojinegra consideraba la primera clave para soñar con su retorno: rescindir el vínculo con los aztecas. 

El propio jugador publicó en Instagram: "Llegó el momento de irme y no quiero dejar pasar la oportunidad para agradecer a Pumas por haber confiado en mí, voy a estar agradecido por siempre. Una mención especial a la afición que nos hicieron sentir de local en todos los estadios. Gracias por todo, México; te quiero".

Pero tan importante como su salida de Pumas era la opinión del juez Fabián Bellizia acerca de la conveniencia de sumarle a los gastos corrientes del club la suma a abonarle a Formica por su contrato. Y el magistrado habilitó un monto que ni siquiera se acercó a lo que pretende ganar el medicampista. 

Si bien hay cariño mutuo, Formica es un profesional que está en la parte final de su carrera y no se puede permitir dejar pasar un contrato como el que podría firmar con algún otro cub (¿San Lorenzo?). Por lo que esta vez, el corazón no tendrá la prioridad. Y la dirigencia lo entiende.

De este modo, a pocas horas del cierre del libro de pases, el del arquero sería el último puesto a reforzar. Y si bien el que interesaba era Augusto Batalla, golero que River cederá a préstamo a Tigre, ahora el que arribaría es Alan Aguerre, que viene de quedar libre de Vélez.