Atletas y entrenadores argentinos salieron con todo en defensa del Ente Nacional del Alto Rendimiento Deportivo (Enard), que podría perder su independencia financiera si se aprueba el proyecto de reforma tributaria en el Congreso. Deportistas amateurs y consagrados, que reconocieron la “transformación” que produjo este programa para el deporte nacional, emitieron un escrito advirtiendo su alarma por el posible cambio de financiamiento del Ente.

Por ejemplo, el ex ciclista Juan Curuchet -campeón olímpico en los Juegos de Beijing 2008- le pidió expresamente al presidente Mauricio Macri, en declaraciones a Télam, que "revierta la situación" de ese organismo para garantizar el normal funcionamiento desde su creación en 2010.

El marplatense advirtió el riesgo de que las becas a los deportistas argentinos dependan de "la política", algo en lo que coincidió Federico Pizarro, miembro de Los Gladiadores de handball, cuando pidió que el Enard "no sea rehén" de los gobiernos de turno.

La independencia financiera del Enard entró en zona de riesgo ya que el proyecto de reforma impositiva que impulsa el Gobierno nacional para el año próximo le quita a este organismo un ingreso clave para su actividad: el cobro del 1 por ciento en las facturas de telefonía móvil.

El presidente del Comité Olímpico Argentino (COA) y titular del organismo en discusión, Gerardo Werthein, manifestó su preocupación al respecto en su cuenta de Twitter, al tiempo que el secretario de Deporte, Carlos Mac Allister aclaró que "seguirá funcionando de la misma manera y con la misma conducción".

"Sin dudas que es una mala noticia, creo que el Enard tendría que ser autónomo e independiente de la política. A partir de su creación hubo una mejora increíble en lo que es el deporte amateur y también en aquellos consolidados como el hockey", enfatizó Pizarro a Télam.

El "Gladiador", de 31 años, apuntó que todas las disciplinas "tuvieron un incremento notable en la cantidad de competencias encaradas y los resultados estuvieron a la vista" en los diferentes ciclos olímpicos.

"En lo particular, el Enard me dio la posibilidad de pagarme pasajes, estadías y comidas cuando participaba de los seleccionados juveniles de handball antes de mi debut en el equipo mayor en 2007", precisó.

Del mismo modo, la tiradora cordobesa Fernanda Russo, de 18 años, olímpica en Río de Janeiro 2016, destacó a Télam que le Enard resultó "importantísmo tanto en la preparación como en el rendimiento deportivo" a lo largo de su incipiente carrera.

"Gracias al Enard puedo viajar a competir y entrenar y sustentarme para comprar equipos deportivos que son muy caros y que mis papás, de quienes dependo económicamente, no podrían comprar porque los gastos son excesivos", relató.

A su turno, el entrenador Carlos "Chapa" Retegui -campeón olímpico en Río de Janeiro 2016- no dudó en asegurar que el Enard "fue lo mejor que le pasó al deporte argentino en toda la historia" gracias a sus objetivos de "planificación, visión, preparación y apoyo incondicional" a los altetas.

"Es importante que el Enard, la secretaría de Deporte y el COA actúen colectivamente porque el deporte nacional depende de esas instituciones. Hay que proyectar a 18 o 20 años, así llegan los éxitos", abundó el conductor de Los Leones, seleccionado masculino de hockey sobre césped.

El regatista Santiago Lange, también ganador de una medalla de oro en Río, alertó que "sería un gravísimo error" modificar el funcionamiento del ente autárquico.

"Creo que no hay ningún deportista de alto rendimiento que crea que el Enard no funciona. No soy un especialista en economía ni mucho menos, pero me cuesta entender que algo que hace tan bien al país como el Enard lo quieran sacar", dijo en Radio Belgrano.

Finalmente, Gustavo Fernández, el mejor del mundo en tenis adaptado, reconoció: "Si no fuera por la incalculable ayuda del Enard yo no podría estar donde estoy y así todo el deporte amateur argentino".